Con anterioridad hemos hablado de los tejidos a utilizar. Hoy traemos una entrada para ayudarte en la elección del ‘formato de la cortina’. Existen infinidad de estilos. Intentaremos detallarte las distintas opciones, para que la elección de la cortina sea más fácil. No dudes en consultarnos si tienes otra idea en mente. Seguro que podremos encontrar la mejor solución a lo que estás buscando.

 

En lo que se refiere a largo de cortina hay muchas tendencias. Lo más habitual es que la cortina quede a 1,5 cm. del suelo; lo suficiente para que no arrastre y coja suciedad en el bajo. Sin embargo, los estilos son muy variados. Una cortina ‘arrastrona’ dará calidez y una sensación más envolvente, aunque necesitarás más espacio y cuidado. En caso de que sitúes una mesa delante de la ventana, te aconsejamos  cortina corta o estor, ya que es la solución más práctica y ligera, siempre teniendo en cuenta las posibilidades de apertura de la ventana.

 

Para adentrarnos en el sistema de sujeción, nos pararemos a mostrar los tipos de confecciones que existen. Unos u otros determinarán si elegir barra, riel u otro tipo de mecanismo:

 

Cortina a tablas: Junto a la cortina fruncida es la confección más utilizada. Requiere poco espacio entre ventana y escayola al quedar muy asentada,  lo cual beneficia su caída. El ancho de la tabla viene determinado por el dibujo de la tela que, salvo que este sea grande, suele rondar los 10 o 12 cm. Lo ideal es que las tablas vayan juntas, por lo que se necesita un 300% de tejido. Este tipo de confección nos permite instalar tanto sobre riel, como en barra decorativa.

 

Cortina fruncida: Confección más informal que la tableada. Su pliegue más anárquico hace que su caída sea más voluminosa. Aunque nos permite instalación en barra, es recomendable ponerla en riel de cuerda. Los pliegues hacen efecto fuelle y se logra mayor asentamiento si la cortina está tensada.

 

Cortina a moñas o cinta americana: Si existe una confección entre tableada y fruncida, es esta. Confección elegante, con caída voluminosa. La pinza triple realza el estilo de la cortina dando un toque clásico, suave y distinguido. Es apropiada para ir instalada sobre barra, donde realza más su estilo, aunque también puede soportarse en un riel.

 

Cortina con trabillas: Modelo sencillo y actual para colocar únicamente en barra y sustituyendo  las clásicas anillas. Las presillas pueden hacerse del mismo tejido o utilizar un contraste. En Tapicerías Toribio solucionamos el pequeño inconveniente del peor deslizamiento de la trabilla con respecto a la anilla, y facilitamos la forma de descolgar la cortina sin tener que desmontar el conjunto de la barra.

 

 

 

 

 

Cortina con ollaos: Solución sencilla y de fácil manejo, encaja perfectamente tanto en ambiente clásico como moderno. Únicamente instalable sobre barra. Admite cualquier tipo de tejido, pero requiere espacio amplio para el pliegue de la tela en su zona superior. Su caída es recta formando una onda.

 

 

 

 

Cortina onda perfecta: El conjunto del riel con correderas y la cinta especial para realizar la confección dan como resultado este sistema de cortinas al alza. Las posibilidades son muy amplias y el resultado nada recargado puesto que solo lleva el doble de tejido. El efecto que se consigue es similar al de los ollaos, con la diferencia de que la ondulación que se consigue siempre es simétrica y perfecta sin necesidad de colocarla. Únicamente instalable sobre este tipo de riel, aunque existen varios tipos de modelos.

 

Panel japonés: De estética lineal y minimalista, son la solución ideal tanto para superponer en ventanas, como para utilizar como separadores de ambientes u ocultar soluciones de almacenaje abiertas. Están compuestos por varios paneles, de un mismo tejido o tejidos distintos, que se mueven horizontalmente por unas guías, cruzándose y superponiéndose entre sí para otorgar intimidad e impedir el paso de la luz. Admiten todo tipo de tejidos, incluidos tejidos técnicos como el screen. Fácil mantenimiento, con instalación única a riel especifico, aunque con varias opciones de apertura.

 

Estor paqueto: Sistema de apertura superior. Un clásico que nunca pasará de moda. Plegable sin varillas que queda a medidas entre la cortina y el estor enrollable. Nunca ha perdido su sitio en el mercado. Perfecto para los estilos decorativos más étnicos, vintage o rústicos, sin dejar de adaptarse a los modernos. Admite alguna variante de instalación, como la colocación en barra con trabillas, pero siempre con mecanismo de estor.

 

Estor varillas: Sistema similar al anterior, pero con la línea más recta. De los pliegues irregulares del estor paqueto, pasamos al pliegue perfecto que marca la varilla encajada en el tejido. Requiere para ello una tela con más cuerpo como puede ser una loneta. La instalación demanda mecanismo de estor.

 

Estor enrollable: Solución alternativa moderna, normalmente utilizada con tejidos técnicos, a base de polipoliéster, PVC y fibra de vidrio, cuya función principal es tamizar la luz solar, incluso directamente no permitir su entrada con tejidos totalmente opacos. Otra variante es el estor noche y día con bandas opacas y translúcidas que al superponerse unas sobre otras, permiten regular la entrada de luz. Su mecanismo se centra en un tubo en torno al cual se enrolla el tejido. Accionamiento con cadena o motor, y posibilidad de instalación en exteriores. Admite impresión digital.

 

Cortina vertical: Excelente solución para grandes ventanales, incluso para la separación de ambientes. Utilizada con tejidos técnicos, su sistema de láminas en vertical permite graduar la luz en cada momento. Aunque es una solución decorativa que nos puede recordar a sistemas utilizados en oficinas o escaparates, lo cierto es que cada vez es más demandada para hogares. Debido a la gran variedad de tejidos y colores se pueden crear ambientes modernos y luminosos. Las lamas giran sobre su centro con un mecanismo sencillo y se enfilan hacia un sentido o el otro en función de lo que más nos interese. Previa elección también abren al centro o a un lado u otro.

 

Persiana Veneciana: De aspecto moderno y vanguardista es la forma moderna y práctica de vestir las ventanas como alternativa a los tradicionales visillos o estores. Fabricadas de finas lamas de aluminio, madera o PVC, permiten graduar o no permitir la entrada de luz de forma horizontal. Sus características lo asemejan a la cortina vertical, siendo su recogida en la parte superior.

 

Cortina plisada: Su adaptabilidad y mínimo espacio de recogida la convierten en una de las cortinas más versátiles. Es la solución ideal para ventanas que presentan formas especiales, gracias a sus múltiples posibilidades de instalación. Posibilidad de Noche & Día con combinación de dos tejidos en una sola cortina para poder obtener oscuridad total o luminosidad a cualquier hora del día. Varias opciones de accionamiento y apertura.

 

¿Lo tienes claro? Las combinaciones son infinitas. A continuación dejamos una selección de ellas. Esperamos que te gusten.

Panel japones con Estores paqueto

Estor paqueto doble con caida en barra

Panel japones con caidas en barra

Estor Noche y Día

 

Cortina plisada forma redonda fija

Visillos fruncidos a barra sobre Estores paqueto

 

Visillos cruzados en barra doble

Visillos y caidas al vuelo en barra con pinzas